Beneficios del Ejercicio Funcional en la Obesidad:
Quema de Calorías Efectiva: El ejercicio funcional es un excelente quema grasa. Al involucrar múltiples grupos musculares en movimientos compuestos, como las sentadillas o las planchas, tu cuerpo gasta más energía, lo que ayuda a quemar calorías de manera eficiente.
Aumento de la Masa Muscular: El músculo es más metabólicamente activo que la grasa. A medida que aumentas tu masa muscular a través del ejercicio funcional, tu tasa metabólica en reposo también aumenta. Esto significa que quemarás más calorías incluso cuando estés en reposo.
Mejora de la Función Metabólica: Investigaciones, como un estudio publicado en el "Journal of Obesity" (González-Muniesa et al., 2015), han demostrado que el ejercicio funcional mejora la función metabólica. Esto incluye una mayor sensibilidad a la insulina y una mejor regulación del azúcar en sangre, factores clave en la prevención y el control de la obesidad (1).
Fomento de la Adherencia al Ejercicio: Debido a su naturaleza versátil y la posibilidad de adaptación, el ejercicio funcional tiende a ser más atractivo y sostenible. Esto significa que las personas tienen más probabilidades de mantener una rutina de ejercicios funcional a largo plazo, lo que es esencial para combatir la obesidad.
Reducción del Riesgo de Enfermedades Asociadas a la Obesidad: La obesidad está relacionada con enfermedades como la diabetes tipo 2, enfermedades cardíacas y ciertos tipos de cáncer. La actividad física regular, incluyendo el ejercicio funcional, puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar estas enfermedades.
Mejora de la Salud Mental: La obesidad a menudo está relacionada con problemas de salud mental como la depresión y la ansiedad. El ejercicio funcional no solo mejora la salud física, sino que también puede tener un impacto positivo en la salud mental, reduciendo el estrés y mejorando el bienestar emocional.
Conclusión
El ejercicio funcional es una estrategia efectiva y respaldada científicamente para abordar la obesidad. Su capacidad para quemar calorías, mejorar la masa muscular, regular el metabolismo y promover la adherencia al ejercicio lo convierte en una herramienta esencial en la lucha contra la obesidad. Sin embargo, es importante recordar que, antes de iniciar cualquier programa de ejercicios, especialmente si tienes condiciones médicas preexistentes, es fundamental consultar a un profesional de la salud o un entrenador calificado.
Referencias:
González-Muniesa, P., Mártinez-González, M. A., Hu, F. B., Després, J. P., Matsuzawa, Y., Loos, R. J., ... & Corbatón Anchuelo, A. (2015). Obesity. Nature Reviews Disease Primers, 1, 15034.